El otro día leí de nuevo un artículo chocante sobre los Cirujanos Plásticos en un periódico de tirada nacional, un tendencioso reportaje sobre "Los Mejores del Mundo", refiriéndose a esta "casta"de nuevos magos en los que algunos nos quieren convertir... y no pude más que preguntarme ¿cómo diantre habrían hecho esa curiosa clasificación? Y no es que no me diera envidia no encontrarme entre esos "supuestos" cirujanos de élite mundial, sino que me resultó paradójico que alguien pueda medir de alguna forma los méritos y las habilidades de los cirujanos del mundo para acabar haciendo con ello una clasificación al modo de "bota de oro del futbol quirúrgico" o similar. Les puedo asegurar que conozco personalmente a muchos cirujanos a los que he visto operar en vivo, he visitado sus clínicas y he leído sus artículos, y podría hacer otras cien listas, cada una diferente en función de: cuantos pacientes operan a la semana, si destacan en la Estética o en la Reparadora, sus habilidades como cirujanos, sus dotes de liderazgo y formadores de opinión, etc. Y es que es inauditamente arriesgado, por no decir temerario, que un periodista pueda hacer una clasificación ni medio fiable de un campo tan complejo como la cirugía plástica.
Sin embargo, y dejando al margen esas listas (que en muchos casos están directamente subvencionadas por los mismos cirujanos que allí aparecen), están "Los Genios", y esos no abundan en el mundo, yo de hecho no podría referir a más de 15 o 20, y seguramente sería injusto (por desconocimiento) con alguno. ¿Y como sabemos que estamos ante un Genio? Pues yo destacaría de estos personajes singulares que sobresalen sobre la media de Cirujanos: Una inteligencia superior, una habilidad manual extraordinaria, una visión del futuro privilegiada y una capacidad de trabajo sobrehumana. Cada una de estas características, por separado y aumentada frente a las demás, ya hacen de un buen Cirujano Plástico un cirujano especial, pero cuando todas ellas concurren en una sola persona, surge "El Genio".
Seguramente muchos de mis colegas al leer esto se sentirán insultados, porque ya el hecho de llegar a ser Médico, Cirujano Plástico, (12 años de estudios) y de cierto prestigio, supone de manera implícita tener una inteligencia mayor que la media, una habilidad manual superior a la media y una gran capacidad de trabajo frente a la gente normal... pero el Genio destaca entre todos estos y es lo que lo hace excepcional.
En España hay grandísimos cirujanos plásticos, incluso diría que conozco a más de 40 que rozan ese nivel de excelencia extraordinaria, pero solo conozco un genio: el Dr. Pedro Cavadas. Un personaje con una personalidad difícil, que roza a veces la homofobia y lo antisocial, posiblemente porque no comprende que la gente normal (incluida la comunidad médica) no pueda seguir su ritmo agotador, tanto físico como mental. Un hombre que no deja indiferente a nadie y que entre los que lo conocemos, cuenta con una mayoría que lo detesta abiertamente mientras otros (la inmensa minoría) lo admiramos.
En España tenemos la triste costumbre de compararnos continuamente y envidiar a todos los que nos superan de alguna manera, da igual que sea por dinero, por sus habilidades o su éxito, y puedo asegurar sin temor a equivocarme que muchos se alegrarán de los fracasos del Dr. Cavadas. Yo, sin embargo, me alegro de que en España tengamos la suerte de tener a un hombre de esa capacidad y valía (y me abstengo de juzgar muchos de sus planteamientos quirúrgicos, entre otras cosas porque un Genio solo debe ser juzgado por otros Genios, y yo no me tengo por tal), y porque estamos acostumbrados a leer que "los listos con gafas" del mundo son americanos o rusos... ¡Pues hala!, un Español.
Un Genio, señores, es un fuera de serie, una mente hecha para el estudio y el conocimiento que es capaz de asimilar miles de conceptos sin que estos se olviden, creando una capacidad de decisión difícilmente igualable, por tanto, no puede someterse al arbitrio común de los seres normales y corrientes, y aunque la sociedad a veces intenta esconderlos o disimularlos entre la mediocridad, acaba brillando y saliendo a flote. ¿Sabían que el Dr. Cavadas, al terminar la especialidad como Residente MIR de forma brillante no fue contratado por ningún hospital de toda nuestra geografía? La razón es tristemente la de siempre..., ningún jefecíllo de Servicio mediocre quería a alguien tan "peligroso" a sus pies haciéndole sombra.
Lo fácil para él habría sido abrir una consulta de Cirugía Estética privada, pero al Dr. Cavadas nunca le gustó la Cirugía Estética, es más gustaba de definirla en los congresos como "peluquería", lo cual como comprenderán no hizo más que añadir enemigos a su largo curriculum de detractores.
Yo coincidí con él desde que éramos Residentes, y para los que no conocen nada de su biografía, déjenme que les cuente alguna anécdota: El Dr. Cavadas hizo la Residencia MIR en el Hospital La Fe de Valencia, y he compartido con él muchos Cursos y Congresos, ya que él terminó la Residencia un año antes que yo y ambos fuimos "Premio Nacional de Resientes" en años consecutivos. Al año siguiente de terminar la especialidad, tuve la ocasión de viajar a Valencia y compartir quirófano con él en el Hospital de Mutuas. Recuerdo que hizo varias intervenciones de cirugía de la mano y terminamos de operar cerca de las diez de la noche. Yo estaba muy cansado, pero cuando nos marchábamos, él recorrió los quirófanos de al lado para ver si quedaba alguien operando, y ¡bingo! Los Traumas estaban operando una fractura abierta de tibia a la que le faltaba sustancia. Pedro se acercó y preguntó: - ¿qué tal? ¿Cómo vais a cerrar la tibia? ¿Necesitáis que os saque un poco de cresta iliaca para poner un injerto? A los Traumas se le apareció la Virgen, y él, ni corto ni perezoso, se volvió a lavar y se metió a operar con ellos... eso es el Dr. Cavadas en esencia.
Yo me marché porque al día siguiente tenía que ver operar al Dr. Fontana (tristemente fallecido), pero le dije: -¿no te esperaba tu mujer a cenar?... Supe que no mucho después se había divorciado. Pero es la parte negativa que tiene ser Genio: Vives por y para tus dones y el Dr. Cavadas y la Cirugía Reparadora son una misma cosa.
Al final de este artículo podremos filosofar si es bueno o no ser un Genio, si se es feliz... que hay otras cosas... que hay que disfrutar de la vida... bla, bla, bla. Ya estamos como siempre, juzgando y comparando con nosotros mismos. Si me preguntan a mí, hay una parte egoísta de mí que querría haberlo sido, pero si lo pienso bien ... "Virgencita, virgencita..." preferiría seguir como estoy.
Cada uno tiene su destino y hay que alegrarse del bien ajeno. Yo me alegro de tener al Dr. Pedro Cavadas entre nosotros, no digo que sea el mejor cirujano del mundo, es más, creo sinceramente que en España hay mejores Cirujanos que él, pero él tiene ese punto de locura necesaria que hace que la ciencia progrese, por eso me alegro de que triunfe, que sea él mismo, con sus victorias y sus derrotas, con su carácter y sus excentricidades... porque díganme: ¿A cuántos Genios de verdad conocen?
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